La preocupación por la demanda de microchips y semiconductores que evidenciaba una falta de suministros que, a su vez, ocasionó un importante retraso en los productos vendidos en las grandes campañas comerciales parece haber quedado atrás este año.
Inversiones mundiales que dan la espalda a la automoción
Roland Berger avisa que estos tipos de chips “corren un mayor riesgo de ser escasos” ya que los inversores buscan, cada vez más, chips avanzados. El caso, es que el foco de los inversores no está en los chips más necesarios sino en los más rentables y estos no suelen ser precisamente los utilizados en la automoción.
La mejora en las ofertas tiene sentido bajo la demanda de los llamados “chips heredados”, que son utilizados principalmente por empresas automotrices e industriales. Según la consultora, el 62% del mercado industrial dependen de chips de señales analógicas, unidades de microcontroladores o componentes tipo MEMS.