De 70.000 a más de 82.000 coches. La planta de Stellantis en Madrid esquiva la crisis de los semiconductores y prevé aumentar un 20% su producción este año, en comparación con el mismo periodo de 2021, a pesar de la falta de piezas que sufre el sector de la automoción en general. Además, el fabricante automovilístico calcula que la recuperación de los niveles previos al impacto de la pandemia llegará a finales de 2023 con la mejora de los niveles de abastecimiento de chips y la eliminación de los cuellos de botella en la fábrica, hasta alcanzar las 100.000 unidades.
Así lo ha confirmado la directora de la planta de Stellantis en Madrid, Susana Remacha, en un encuentro con los medios de comunicación en el que ha anunciado una mejora de la producción en la fábrica a pesar de que aún persisten los problemas de abastecimiento de piezas provocados por el impacto de la crisis de los semiconductores. En concreto, ha señalado que la fábrica ubicada en Villaverde alcanzará este año el ensamblaje de 82.000 coches, lo que se traduce en casi un 20% más en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando cerró con 70.000 unidades.
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