16 de septiembre de 2014

EL GIGANTE ALEMAN ZF COMPRA TRW. (LA FUSION DE DOS GIGANTES DEL AUTOMOVIL)

El Faro de Vigo (16-09-2014).

La operación asciende a 10.465 millones y crea el 2º mayor fabricante de componentes del mundo.

El gigante alemán de componentes para automoción ZF Friedrichshafen AG (ZF Group) ha cerrado tras dos meses de negociaciones la compra del consorcio norteamericano TRW Automotive por un monto de 13.500 millones de dólares (10.465 millones de euros al cambio actual), según indicaron ayer ambas compañías. La operación, en la que se incluyen las tres plantas y el centro de ingeniería que TRW Automotive tiene en la comarca de Vigo (con más de 500 trabajadores en plantilla), crea el segundo mayor fabricante mundial de componentes, solo por detrás de la también germana Robert Bosch. ZF precisó que TRW seguirá operando como una "división independiente de negocio" dentro de la multinacional alemana, interesada en el know-how y los avances en materia de conducción automatizada y conectividad del consorcio industrial con sede en Livonia (Michigan).
Según el acuerdo de compra, ZF desembolsará 105,6 dólares (81,8 euros) por acción, lo que representa una prima del 16% respecto al precio de cotización de TRW en la bolsa de Nueva York del pasado 9 de julio. La operación fue aprobada por el consejo de administración del consorcio estadounidense y por los consejos de administración y supervisión de ZF. El presidente y consejero delegado de TRW, John C. Plant, destacó que ZF es una compañía exitosa que mantiene los mismos valores y enfoques que su corporación y destacó que esta venta aporta "beneficios significativos" para sus accionistas. Por su parte, el consejero delegado de ZF, Stefan Sommer, subrayó que la compra encaja "perfectamente" en su estrategia de negocio a largo plazo, puesto que permite la combinación de dos empresas de gran éxito que tienen grandes registros de innovación y de crecimiento, así como posiciones financieras sólidas.
La absorción de TRW obligó al gigante alemán a desprenderse antes de su 50% en la joint venture ZF Lenksysteme (líder en el área de la dirección eléctrica asistida), compartida con Bosch, para no incurrir en conflictos de competencia de mercado. También TRW vendió la semana pasada su división de válvulas de motores a Federal Mogul por unos 300 millones de euros, como avanzó FARO. La compra de TRW Automotive, como es habitual en este tipo de transacciones, está sujeta al visto bueno de las autoridades regulatorias y está previsto que se complete en el primer semestre de 2015.

ZF Group, que tiene su sede en Friedrichshafen y cuyo principal accionista es la Fundación Zeppelin (creada por el pionero de los dirigibles, Ferdinand von Zeppelin, en 1908), se encuentra entre los diez mayores fabricantes de componentes del mundo y está especializado en el diseño, desarrollo y producción de sistemas de propulsión y trenes de conducción para automóviles y vehículos industriales. El año pasado alcanzó una facturación de 16.800 millones de euros, y su plantilla, repartida entre 122 plantas en 26 países, suma 72.643 personas. TRW Automotive, por su parte, logró unas ventas de 12.889 millones euros en 2013, siendo el grupo alemán Volkswagen su principal cliente.

TRW había cerrado la compra del 68% de la firma viguesa de componentes Dalphimetal en 2005 a la familia Sanz por unos 113 millones de euros, a los que se sumaban 84 millones correspondientes a deuda. La compañía gallega (cuya sede social estaba en Madrid) tenía entonces factorías en España, Portugal, Francia y Túnez, en las que producía principalmente volantes y airbags (entre otros elementos de seguridad). Nueve años más tarde, la comarca viguesa continúa siendo un enclave estratégico para la división europea de TRW, con tres plantas (dos en O Caramuxo, Dalphimetal España y Dalphimetal Seguridad, y una tercera de estructuras de magnesio en Porriño) y un centro de investigación y desarrollo (en el que trabajan unos 180 ingenieros). En España cuenta con otro complejo de innovación en Valladolid y una oficina comercial en Madrid, y en Portugal tiene tres fábricas: dos en Ponte de Lima y una en Vila Nova de Cerveira. Las gallegas emplean en total a medio millar de trabajadores.
Dalphimetal fabrica airbags (para conductor, pasajero, tórax, cortina, rodilla, etc.), generadores, sacos, tapas para airbags, volantes (de poliuretano, acabados en cuero, madera, multifunción, etc..),clockspring y componentes de magnesio. Sus principales clientes son Renault, PSA Peugeot Citroën, Volvo, Fiat, Nissan, Volkswagen, Seat, Ford, Honda, Land Rover, General Motors, Dacia, Lancia y Alfa Romeo, entre otras marcas.